Hace unos días, la Federación Española de Balonmano anunciaba la convocatoria de 30 jugadoras de la generación 2002-2003 para unas jornadas de tecnificación en Burgos a finales de julio. Entre ellas está Lucía Olivier, que con catorce años ya es una de las “guerreras promesa” del balonmano a nivel regional y nacional. Convocada ya varias veces con la selección cadete, Lucía asegura que esta nueva llamada del combinado nacional le anima a seguir trabajando para llegar algún día a la selección absoluta.
1. Has sido convocada para las jornadas de tecnificación cadete de la Selección Española, aunque ya habías sido convocada anteriormente para diferentes concentraciones. ¿Cómo te has tomado la noticia?
Esta vez me tomé la noticia con algo más de tranquilidad porque ya he vivido esa experiencia, aunque con mucho entusiasmo por tener el gusto de volver a vivirla de nuevo.
2. ¿Qué esperas de estas jornadas de julio?
De estas jornadas espero aprender muchísimo más y disfrutar.
3. ¿Crees que es importante que se trabaje en la cantera deportiva, en este caso, del balonmano?
Creo que es muy importante trabajar, ya que sin esfuerzo no hay recompensa.
4. Eres una de las promesas del balonmano canario y español. ¿Te ves en la Selección Absoluta?
Ese es mi principal objetivo y sueño, aunque sé que tengo que trabajar muy duro para conseguirlo, pero estoy dispuesta a ello.
5. Eres muy joven y ya estás afrontando entrenamientos y concentraciones a nivel nacional. ¿Qué te dicen tu familia y tu equipo, el CB Puerto del Carmen?
Mi familia está muy orgullosa de mí, y me dicen que trabaje para conseguir mi sueño. Pero sobre todo que disfrute de las experiencias que estoy viviendo. Mi equipo me dice que siga dando lo mejor de mí y me apoyan mucho.
6. ¿Cómo y por qué empezaste en el balonmano?
Empecé en el balonmano cuando estaba en el colegio, concretamente en sexto de primaria. Dos entrenadores vinieron a hacer una clase de demostración y me gustó mucho, así que decidí ir a entrenar un día para probar aunque ya estaba apuntada a tenis. Desde entonces, seguí yendo, pero me coincidían los entrenamientos de tenis con los de balonmano y al tener que elegir opté por balonmano. A eso incluyo que mi hermana Mónica también practicó este deporte cuando tenía mi edad en el mismo club y con los mismos entrenadores que yo.
7. ¿Siempre has ocupado la posición de extremo derecho?
Aparte de ser extremo derecho, en las categorías alevín e infantil también ocupaba la posición de lateral derecho.
8. ¿Qué objetivos tienes como jugadora a corto plazo?
Mis principales objetivos son seguir creciendo tanto a nivel insular como nacional, y poder organizarme para no tener que dejar el deporte por los estudios cuando llegue a la universidad, y aprender mucho.