Constancia, humildad y pasión por la montaña. Así podría resumirse la trayectoria de Carmelo González, uno de los nombres más reconocidos del trail running canario. Natural de Gran Canaria, Carmelo lleva más de una década recorriendo senderos y superando desafíos en las islas y fuera de ellas, con una filosofía clara: disfrutar del camino por encima de todo.
En esta entrevista, hablamos con él tras su reciente victoria en la Circular de Tejeda. Nos cuenta cómo fueron sus inicios, cómo gestiona mentalmente una ultra, qué significa correr en Canarias y cuáles son esas carreras que todavía sueña con hacer.
Entrevista a Carmelo González
Macaronesia Sport: Cuéntame primero, ¿quién es Carmelo González y cómo empezaste en el mundo del trail?
Carmelo González: Pues bueno, como bien dices, mi nombre es Carmelo González, corredor de Gran Canaria. Empecé en esto hace ya unos añitos, por allá por diciembre de 2011. Fue mi primera carrera, aunque no recuerdo bien cuándo empecé a entrenar… fue un poco, casi por casualidad.
Yo venía de jugar al balonmano, siempre he jugado balonmano. Estuve unos 20 años, incluso cuando decidí dejarlo fue más bien por responsabilidades familiares, porque iba a ser padre y demás. Estaba jugando a nivel nacional, así que tenía que viajar cada 15 días… y era un poco lío.
Buscando deportes alternativos que me permitieran adaptarme a mi tiempo, encontré esto. Siempre he hecho deporte, soy la típica persona que le invitas a cualquier deporte y va. Y la verdad, fue una casualidad: tenía un primo que hacía la Transgrancanaria desde hacía años, y siempre lo recordamos porque me metía mucho con él. Le decía que estaba loco, que eso de estar veintipico horas por ahí corriendo era una locura.
Pero me llamaba la atención. Esa idea de cruzar la isla por tus propios medios, eso me atraía. Y un poco así empecé. La primera carrera a la que fui la organizaba, precisamente, el club de mi primo… y ahí fue donde empecé a engancharme, como quien dice.
Macaronesia Sport: Cuéntame cómo fueron esos inicios.
Carmelo González: Para que te hagas una idea, empecé a correr en 2011, y creo que la primera Transgrancanaria clásica a la que me presenté fue como en 2017, o por ahí. Fue bastantes años después.
Yo empecé, como todo el mundo, por disfrutar, por hacer deporte, por conocer nuevos sitios… Y la verdad, conocí lugares increíbles de la isla que no conocía. Luego empecé a descubrir otras islas también.
Y ya en 2014, si no recuerdo mal, empecé con un entrenador personal, con David Alcón, con quien estuve incluso ocho años. Y fue un poco con él con quien empecé a ver que podía competir, que podía estar al nivel en ciertas carreras, al menos en el circuito canario.
Así estuve durante 2014, 2015, 2016… y cada año iba subiendo un poco el nivel a nivel competitivo. Y ya en los años antes de la pandemia apenas competía aquí en Canarias; casi todo lo hacía fuera: carreras en la Península, en Portugal, en Italia, etc. Fue ese el periodo en el que estábamos más fuera de las islas.
Macaronesia Sport: ¿Cuál es esa carrera que siempre tendrás en la memoria?
Carmelo González: La verdad es que me gustan muchísimas, y te podría hablar de muchas por la experiencia, por el paisaje… Por ejemplo cruzando los Pirineos en una semana… No sé. Pero si tengo que elegir una que recuerdo con mucho cariño, sería la TDS de 2022.
Ese top diez en la TDS del Mont Blanc me marcó, por cómo fue todo. Era una carrera que llevaba esperando dos años. Iba a ir en 2020, pero llegó la pandemia. En 2021 tampoco pudimos ir… Así que en 2022 por fin se dio.
Además, fui con Iván, mi compañero de entrenos, y también con mi familia. Y lo bonito es que los dos quedamos en el top diez. En una UTMB… nos salió redondo, como decimos. Es difícil de olvidar: el ambiente, los paisajes, la carrera en sí, la experiencia… Todo.
Así que, si tengo que quedarme con alguna por las emociones que vivimos ese fin de semana, sería esa: la TDS de 2022.
Macaronesia Sport: ¿Cuál fue el momento, o con qué carrera, sentiste que esto era para ti? Que se te daba bien.
Carmelo González: Esa es otra de las carreras que sí recuerdo, sí. La verdad es que desde el principio, desde el comienzo, yo sabía que lo mío era correr largo. A mí las distancias cortas, explosivas… nunca me han gustado. Las corría poco porque no podía hacer volumen, y encima lo pagaba más.
A día de hoy, de hecho, intento no correr carreras de menos de maratón de montaña. Entonces creo que fue en el año… puede ser 2014 o 2015, no recuerdo bien. Pero fue en 2015, perdón. Una carrera que creo que quedé tercero. Y ahí fue un poco donde dije: “Oye, pues puedo estar aquí”.
Compartí carrera con gente que, años atrás, yo los veía y le decía a este mismo amigo —el que me animó al principio y con el que fui a la tienda—: “Oye, ¿algún día correremos como esta gente?” Y él me decía: “Tu tiempo llegará”.
Y lo miré, y sí, ahí fue cuando me di cuenta: “Oye, pues sí, puedo estar ahí”. Y de hecho, creo que después de esa carrera corrí el maratón de Almería y también hice un top cinco o algo así… incluso tercero en el Campeonato de Canarias con la Federación de Atletismo, algo por el estilo.
Ahí fue cuando empezó un poco mi parte más competitiva.
Macaronesia Sport: Cuando no tenías entrenador, ¿sabías dosificarte bien en carrera?
Carmelo González: Es que mi forma de correr no es explosiva. Es raro que yo explote en una carrera, porque siempre voy de menos a más. Casi siempre termino con bastante más fuerza de la que empiezo. Es verdad que ha habido carreras en las que sí, pues nada, bajón… y hasta ahí, pero han sido muy pocas.
Por mi naturaleza, no soy capaz de salir fuerte y luego dosificar. Prefiero ir poco a poco. Con los años he aprendido a calcular bastante bien los tiempos que puedo hacer en función del estado de forma en el que estoy, incluso aunque no conozca el recorrido.
Eso me ayuda mucho a regular. Pero también voy mucho por sensaciones, no es algo que estudie al milímetro. Simplemente ya me conozco y sé cómo responder.
Macaronesia Sport: Volviendo a esa carrera con tu compañero, cuéntanos cómo viviste ese momento, qué expectativas tenías antes y cómo fue la experiencia. ¿Ibas a disfrutar o realmente esperabas estar donde finalmente estuviste?
Carmelo González: Pues mira, nosotros la habíamos preparado juntos. Y es verdad que no íbamos con expectativas de puesto, ni mucho menos. En la cabeza teníamos algunos tiempos, mirando referencias de años anteriores, pero íbamos más bien a disfrutarla.
Era mi tercera o cuarta vez en Chamonix, aunque en la TDS no conocía ese tramo del recorrido. Siempre había corrido por la otra parte, la que pasa por Suiza, no esta. Pero íbamos bien preparados, habíamos entrenado mucho y lo que queríamos era hacer nuestra carrera y olvidarnos del resto.
Siempre decimos que hay que mantener la cabeza muy fría. Ese es el consejo que le damos a la gente: cabeza fría, hacer tu carrera y no dejarte llevar por lo que hagan los demás.
Y así lo hicimos. La fuimos disfrutando. No sabíamos en qué puesto íbamos, yo no lo supe hasta pasada la mitad de carrera. Creo que íbamos sobre el puesto 40, pero ni idea… no lo mirábamos. No teníamos asistencia externa, solo en dos puntos de la segunda mitad de carrera donde mi mujer nos asistió, y ahí ya supimos un poco cómo íbamos.
Me enteré de que iba en el top 10 en el último avituallamiento, no en el penúltimo. Recuerdo que mi compañero siempre iba un poco por delante porque yo me paré al principio, se despegó un poco, pero luego íbamos bastante a la par. Uno más adelante que el otro, pero cerca.
Para que te hagas una idea: creo que en el primer control pasé en el puesto 180 o por ahí. Y para llegar a ese punto, que era el kilómetro 8, ya había adelantado como a 200 personas. La gente sale como loca. Y era de noche, subiendo por una pista de esquí durante 8 kilómetros… ¡y todos corriendo! Yo miraba a los lados y decía: “Pero esta gente no es consciente de que nos queda un día entero corriendo”.
Yo ya estaba acostumbrado y sabía que no era sostenible. El ambiente te empuja a lanzarte, pero hay que frenar. Así que, el consejo que siempre damos es ese: haz tu carrera, céntrate en terminar, y si tienes nivel y buenas sensaciones, ya saldrá el puesto o el tiempo. Pero primero, cabeza.
Macaronesia Sport: ¿Cómo haces tú esa gestión de carrera? Ya no tanto cómo la corres físicamente, sino mentalmente, ¿cómo la gestionas?
Carmelo González: Yo intento seguir un ritmo constante siempre en carrera, de principio a fin. Si es una carrera que conozco, suelo llevar ciertos parciales de referencia, y me van sirviendo para orientarme. Pero también es verdad que voy adaptando mucho sobre la marcha.
Intento hacer lo típico: marcarme metas muy cortitas. Me digo: “Voy a llegar a este avituallamiento”, o “Voy a aguantar hasta que me toque tomarme la sal, o comer, o lo que sea”. Me pongo siempre pequeñas metas para no pensar demasiado, porque a veces la cabeza se nos va un poco.
También me marco objetivos como “esperar a que se haga de día”, y así voy separando la carrera en partes. Poco a poco. Tampoco le doy demasiadas vueltas a la cabeza, porque el cuerpo ya va solo. Lo que sí intento es mantener la mente fría, para no venirme demasiado arriba.
En las ultras, sobre todo, me centro en lo más básico: comer y beber, comer y beber, comer y beber. Y así van pasando las horas. Me digo: “La prueba dura seis horas… ya llevo cuatro. Me quedan solo dos”. Y vas tirando con esos pequeños ánimos.
Se dice fácil, pero cuando llevas ocho horas corriendo, a ver cómo lo haces… Y si llevas veinte, ya ni te cuento. Por ejemplo, en el caso de la TDS —que ha sido la carrera más larga que he hecho—, yo me mentalicé de que iba a estar todo el día en la montaña. Y punto. Dejé que las horas fueran pasando.
Yo me limitaba a avanzar. Y después, con los años, uno también aprende. Por ejemplo, el año pasado estuve prácticamente todo el año parado por lesión, y cuando dejas de competir durante tanto tiempo, se te olvidan muchos de esos pequeños detalles.
Entonces, lo que hago es que tengo un listado con todo lo que he aprendido durante estos años, y antes de una carrera larga le echo un vistazo. Me recuerdo a mí mismo esas cosas que parece que se olvidan. Como por ejemplo que no pasa nada por perder cinco minutos, o incluso diez, cuando llevas diez horas corriendo.
Si te tienes que sentar, te sientas. A veces ni nos paramos a amarrarnos los cordones porque pensamos que vamos a perder diez segundos… y al final eso es absurdo. Así que intento recordarme todo eso para no cometer los mismos fallos de siempre.
Macaronesia Sport: Vienes de ganar la Circular de Tejeda. ¿Qué te espera el resto del año?
Carmelo González: Sí, esta temporada la estoy llevando de forma un poco distinta. La temporada pasada fue bastante complicada… Me fastidié preparando la Transgrancanaria. Venía de romperme los dos meniscos, primero el derecho y a los dos o tres meses el izquierdo, mientras me recuperaba del primero.
No pasé por quirófano, así que la recuperación fue más lenta. A día de hoy los tengo rotos, sigo teniendo el menisco roto, pero no me molesta. Lo único que no puedo es ponerme una Biglia, pero el resto más o menos bien.
Entonces, en 2022, después de la TDS, ya había decidido que no iba a seguir con el entrenador, que me iba a tomar las cosas de otra manera. Seguí entrenando por mi cuenta y ya iba haciendo carreras un poco por el gusto de conocer sitios, por disfrutar, sin presión. Y este año he querido retomar esa filosofía.
Me apunté a la Transgrancanaria un poco como prueba, para ver si podía volver a correr larga distancia o no. No sabía hasta dónde iba a llegar, porque la recuperación fue muy lenta. Estaba entrenando, sí, pero no estaba compitiendo porque no sabía cómo iba a responder el cuerpo.
Hice la Trans, y la hice en 16 horas y 42 minutos. Yo había planificado hacer 16:30, así que más o menos cumplí con lo que me había marcado. Vi que podía volver a correr.
También es verdad que este año ha cambiado un poco todo por responsabilidades familiares. Mi hijo ha empezado a hacer deporte los fines de semana y eso también condiciona.
Me dije que no iba a correr una carrera si no podía prepararla bien. Si me la puedo preparar bien, la corro; y si no, a por la siguiente. Una de las que sí podía preparar bien era la Circular de Tejeda, que fue la que corrí el sábado.
Y ahora este mes, el 28, haré el Gran Trail Picos de Europa, en Asturias. Luego, en agosto, tocará descansar. Y después del verano… no lo sé todavía. Lo iré viendo poco a poco.
Macaronesia Sport: Acabas de salir de Tejeda con el primer puesto. ¿Cómo fue la carrera?
Carmelo González: Yo, por ejemplo, siempre me he defendido mejor en las bajadas que en las subidas. Y en la larga distancia, como no hace falta bajar excesivamente rápido, suelo aprovechar las bajadas para recuperar y desgastar menos que los demás, como quien dice.
Luego, en las subidas, intento simplemente mantener el ritmo.
Tejeda, igual que te decía antes con el tiempo que hice en la Trans, fue un poco lo mismo. Yo sabía lo que iba a hacer porque lo había entrenado. Aunque… en este caso hay una historia aparte.
El jueves de la semana anterior a la carrera —no el mismo jueves antes de la prueba, sino el de la semana anterior— fui a entrenarla completa… pero no la pude terminar. Me caí, me lastimé la rodilla, y además tuve un problema con un águila —sí, un águila— y me salí del camino.
Se me juntó todo un poco: el calor, un golpe de calor, me quedé sin agua… y acabé tirado en el barranquillo. Caí sobre la rodilla, y casi no salgo de allí. Fue un mal día, pero bueno, me pude recuperar a tiempo para estar en la línea de salida.
Yo había calculado que podía hacer el recorrido en 6 horas y 30 minutos… y al final hice 6:32. Así que bien, más o menos lo que me había marcado.
Esa carrera la tengo muy presente, porque voy a Tejeda desde 2012, que fue la primera maratón que hice allí. Es una zona que conozco bastante bien y a la que siempre me gusta volver. Era una carrera que me apetecía muchísimo.
Macaronesia Sport: ¿Por qué la gente debería practicar más trail, y sobre todo la gente canaria?
Carmelo González: Tenemos unas islas preciosas para practicar este deporte, y cada vez se practica más, eso es verdad. Pero desde mi punto de vista personal, para alguien a quien le gusta el deporte y le gusta la naturaleza, el trail es una forma de unir esas dos pasiones en un solo deporte.
No tiene que ser competitivo, ni tener ningún objetivo concreto. Simplemente se trata de disfrutar. Sin más.
Tenemos la gran suerte de que, además del entorno, hay carreras en todas las islas, prácticamente todos los fines de semana. Por suerte, tenemos donde elegir. Y además, contamos con un clima que nos permite practicarlo durante todo el año.
Entonces, es una manera de vivir eventos que se convierten en una fiesta, de compartir momentos con amigos y encima haciendo deporte. Y yo creo que eso… es lo mejor.
Macaronesia Sport: ¿Cuál es esa carrera que no has hecho, que te falta y que sería un sueño para ti cumplir?
Carmelo González: En las islas me quedarán muy poquitas ya. En Gran Canaria, por ejemplo, creo que apenas me falta alguna. He corrido prácticamente en todas las islas, en las más míticas… el Reventón, el Bluetrail, el Transvulcania, el Meridiano… todo eso ya lo he hecho.
En El Hierro, por ejemplo, solo he corrido una vez, el Maratón del Meridiano. He estado a punto de repetir varias veces y es una de las que me gustaría volver a hacer, porque me gustó mucho.
Si hablamos de fuera… hay tantas y tan espectaculares que cuesta elegir. Pero bueno, siempre he dicho —aunque hace años que no lo comento, y lo decía en entrevistas antiguas— que me gustaría hacer alguna de las grandes americanas. Siempre me ha llamado mucho la atención. También la Diagonal des Fous, en la isla de La Reunión, es otra de las que siempre he tenido en mente.
Lo que pasa es que claro, para ese tipo de aventuras hacen falta dos cosas: tiempo y dinero. Y por ahora no puedo permitírmelo. Pero me gustaría.
No sé si será este año, porque ahora en verano tengo un parón un poco largo por vacaciones y también por temas familiares. Así que cuando retome en septiembre ya veré cómo evoluciona el final de año. Y si no es este, pues el año que viene sí me gustaría afrontar una carrera de 100 millas otra vez.