La Guayre Extreme, carrera de obstáculos que hasta ahora se desarrollaba en Teror, ha dado el salto a la isla vecina y celebra este 24 de noviembre su primera edición en Tenerife, concretamente en Vilaflor. Una prueba que certifica su crecimiento con este traslado y que promete tener el mismo éxito que han tenido sus predecesoras. En un momento en que las OCR se certifican como las pruebas que más crecimiento están teniendo y con la mejor aceptación entre los deportistas, la Guayre Extreme quiere diferenciarse trasladando los obstáculos a la pura naturaleza. Hablamos con Fernando Ruiz, director técnico deportivo de la prueba, para que nos cuente qué hace diferente a esta prueba.
- ¿Cómo surge la idea de trasladar la Guayre Extreme a Tenerife y en concreto a Vilaflor?
La idea de trasladar la Guayre Extreme a Tenerife, y en concreto a Vilaflor surge tras los años que llevamos organizándola en Gran Canaria y concretamente en el municipio de Teror, pues hemos visto que había una aceptación. Y el origen queríamos trasladarlo a otra isla, en este caso la isla vecina de Tenerife, y en concreto en Vilaflor porque la zona es espectacular. Es una zona que tiene unos parajes espectaculares, y tiene la dificultad un poco de la altura y demás, y un poco se asemeja, no en el terreno pero sí a las características de que hay una orografía bastante accidentada. Hay bastante subida, bajada, sendero, pista, y entonces un poco parte de eso. Parte de que queremos dar a conocer la Guayre a otras islas y luego Vilaflor por las características y condiciones del municipio en sí.
- ¿Qué obstáculos destacaría entre todos los que componen el recorrido de las dos distancias?
Los obstáculos que destacaría en este recorrido de la Guayre están muy claros. El primer obstáculo que van a tener que salvar es la altura. Es decir, hacer un esfuerzo a unos 1500 m, Vilaflor es el municipio más alto de Canarias, está situado a unos 1500 m, ya ahí hay una dificultad que van a tener. Otra, también, es el frío, que sabemos que noviembre en Vilaflor es una zona de bastante frío. Esos son obstáculos naturales, algo que se valora incluso a la hora de diseñar el recorrido. No obstante, hay obstáculos que son bastante exigentes, como puede ser el transporte de sacos, porque hay una subida bastante sinuosa, bastante pronunciada, y ahí tendrán que demostrar esa fortaleza. Después también está el monkey, el mono, luego otro obstáculo muy bueno son los saltos de terrazas, que tienen también dificultad, y luego hemos puesto obstáculos de agua, como son atravesar cubetas de agua. Ya sabemos que a la altura y el frío le añades tener que meterte dentro de las cubetas de agua con el frío que ya hace, pues es un poco, bastante exigente, por así decirlo.
- ¿Cuál es la labor del director deportivo de un evento deportivo como éste, en el que el protagonismo es del corredor, pero también de los obstáculos?
En un evento como este, está claro que la principal es la elaboración del circuito. Un circuito que sea atractivo, que tenga dificultades añadidas, también intentar que sean obstáculos naturales, utilizar el medio ambiente lo mejor posible, sin romperlo, por supuesto, sin agredirlo. Ya no solamente con respecto al circuito, sino también la distribución de los obstáculos, características de los obstáculos. También uno de los cometidos del director técnico deportivo, los voluntarios que se requieren, que son necesarios para que la prueba salga bien, la colocación y demás de los avituallamientos, etc., todas estas cositas, son las que tiene que hacer un director deportivo para que el corredor, está claro, sea el protagonista. Porque nosotros trabajamos por y para el corredor. Y luego los obstáculos tienen su protagonismo, como bien dije, y buscamos que sean obstáculos lo más naturales posible, y otros no lo son, pero en ese aspecto que esté equilibrado, por así decirlo.
- ¿Cómo se protege al corredor en este tipo de pruebas?
Cuando ya se hace la inscripción, tiene un seguro de responsabilidad civil y responsabilidad penal, en el supuesto caso de que si hay un accidente pues tiene un seguro que lo protege, pero más allá de eso tenemos a los servicios de emergencias y seguridad. Tenemos los servicios de ambulancia, hay sanitarios, tenemos voluntarios por todo el recorrido en el supuesto caso de que suceda algo, pues siempre en el menor tiempo posible tendrá su ayuda sanitaria y la que le haga falta. Si hay un accidente un poquito grave, hay un seguro que cubre que el corredor no tenga ningún percance, ningún problema y luego en este tipo de pruebas, el corredor en sí tiene que ser consciente de qué carrera es. Es decir, es una carrera con obstáculos, con esta dificultad, obvio es que cuando se inscribe cada uno sabe su capacidad física para poder afrontar este tipo de pruebas.
- ¿Qué cree que diferencia a la Guayre Extreme de cualquier otra prueba de obstáculos?
Nosotros desde que creamos la Guayre, Guayre es una palabra aborigen, guanche, de las islas, donde buscamos un poco corredor, corredora, pues eso, el Guayre en la época. Entonces pues buscamos, intentamos siempre buscar parajes que sean lo más naturales posibles y que no estén mucho en el núcleo urbano. Cierto es que la salida y llegada es en los núcleos urbanos entre otras cosas porque los ayuntamientos colaboran y tiene que haber un evento en el que el municipio también sea partícipe de ello, y la carrera pase por él. Pero lo que sí buscamos es que no haya tanto núcleo urbano sino todo lo contrario. Buscamos que haya naturaleza, buscamos que haya una parte paisajística, y entornos rurales, por lo que procuramos evitar solares, parques y demás. Y este tipo de carrera, lo que es la Guayre, pues una de las características y diferencias que hay es esa, y otras incluso también en los obstáculos. Procuramos que sean también más naturales, utilizar mucho el medio ambiente.
- ¿Veremos alguna distinción con respecto a la Guayre Extreme de Gran Canaria?
Hay bastantes diferencias, simplemente ya por el paraje en sí. Teror lo tenemos a una altura de 800, 900 metros de altura, donde se celebra la carrera, es una zona donde hay mucha vegetación de laurisilva, donde hay mucha humedad, sobre todo en condiciones del terreno. La tierra es una tierra rojiza, y en Vilaflor nos vamos a una altura de 1500 metros, donde es obvio que hará más frío por la altura. Es un terreno más secano, donde hay más pistas de tierra, y es más roca. Esas son las diferencias en principio del circuito. El recorrido está diseñado prácticamente igual en el sentido de que buscamos que haya bastante desnivel acumulado en sí, y en ese aspecto los dos sí tienen las mismas características, pero el recorrido en sí no tiene nada que ver, ni el lugar, ni nada de nada. Por la climatología y las condiciones específicas de cada municipio, de cada lugar. Luego hay unas pruebas que en Teror sí las podemos realizar y en Vilaflor no las podemos realizar, pero precisamente por el mismo terreno. Entonces vamos buscando la alternativa para que sea un recorrido de una prueba con obstáculos bastante atractivos, ya sea la de Tenerife, sea la de Gran Canaria.
- ¿Cuál ha sido la mayor dificultad a la hora de organizar esta prueba?
Una de ellas es que parte del equipo, de la organización, somos de Gran Canaria, y me he tenido que desplazar en tres o cuatro ocasiones para ver el recorrido, buscar un recorrido que sea atractivo para el corredor y corredora; luego también a la hora de la contratación de los obstáculos no lo hemos traído de Gran Canaria, hemos contratado con una empresa de Tenerife que se dedica también a carreras de obstáculos, pues quieras o no, no tienes contacto directo, no conoces los aparatos al cien por cien, entonces eso va requiriendo una dificultad. Luego las típicas: los permisos, reuniones de emergencias y seguridad, todo lo que conlleva en sí, pues son las dificultades que puedan tener en una prueba. Otra de las dificultades que muchas veces he querido pasar por alguna parte o hacer algún obstáculo diferente, y a través de las normas de seguridad pues no te permiten hacer ese obstáculo, o no te permiten pasar por una zona que está protegida. Obvio es que no lo puedas hacer. Otra dificultad es que Vilaflor es un municipio que está bastante alejado y también a la hora de infraestructura hemos tenido un poco más de dificultad de lo normal pero todo lo contrario, estamos encantados de hacerlo ahí.
- ¿Y cuál la mayor satisfacción?
La mayor satisfacción que podemos tener es que la corredora y el corredor, una vez finalizado el evento, hayan dicho “ha merecido la pena venir a la primera Guayre Vilaflor Extreme”. Como bien comento siempre, la máxima satisfacción nuestra es que trabajamos para y por el corredor. Con ese punto de vista, sería un orgullo que para nosotros todo el esfuerzo que hemos hecho, porque siempre lo hacemos mirando lo que comento, que el corredor sea protagonista y se sienta realizado, pues ver la satisfacción de las personas que han participado en el evento, sean voluntarios, corredores, no corredores, incluso el público presente, pues disfruten de una carrera que realizamos y organizamos con mucho cariño y con mucho amor.
- Si tuviera que elegir su parte favorita del recorrido, ¿con cuál se quedaría?
Sinceramente, el recorrido es para mí todo precioso. A mí me encanta todo el recorrido, sí es verdad que tengo mi parte preferida, la parte preferida viene a ser la parte del intermedio, por así decirlo. La zona por donde está el campo de fútbol, el albergue, y subiendo a Pino Enano, Pino Enano se llama, creo. Es la parte más alta también del recorrido, donde si te paras un poquito y empiezas a ver paisajes, es espectacular. Y también me gusta más esa parte porque también hay una subida bastante sinuosa, sin desvalorar el recorrido, porque como digo el recorrido es espectacular, porque Vilaflor tiene esa peculiaridad, que está en altura y respiras campo puro. Entonces el recorrido en sí, en general es espectacular, pero si me tengo que quedar con una parte, sobre todo con el campo de fútbol hacia arriba, hacia la zona alta del recorrido, es la parte que más me gusta.